MONICIÓN DE ENTRADA
Buenas días (noches) hermanos y hermanas en el Señor.
Somos Iglesia y como tal, nos reunimos en el Domingo Día del Señor, para celebrar la fe en la Santa Eucaristía. El pecado hiere, nos aleja de Dios y nos paraliza. Jesús, consciente de ello, se acerca a nosotros para sanarnos y perdonarnos. En la parálisis del hombre, curado por Jesús, vemos el símbolo de nuestras propias parálisis, que no nos dejan avanza hacia el Señor. Cristo vino para reconciliarnos con el Padre, para abrirnos las puertas de una vida nueva. Nos ponemos de pie y cantamos.
SALUDO INICIAL
ACTO PENITENCIAL (Yo confieso)
GLORIA
ORACION COLECTA
LITURGIA DE LA PALABRA
MONICIÓN A LA PRIMERA LECTURA Is 43,18-19.21-25
Isaías, nos proclama la misericordia de Dios para con su pueblo, a fin de construir un presente y un futuro mejor. Escuchamos con atención.
SALMO RESPONSORIAL Sal 40
MONICIÓN A LA SEGUNDA LECTURA 2Cor 1,18-22
El Apóstol Pablo, nos anuncia el cumplimiento de toda promesa en Cristo, quien nos invita a ser una constante respuesta afirmativa a la voluntad de Dios.
Escuchamos con atención.
MONICIÓN AL EVANGELIO Mc 2,1-12
El amor, la fe y la acción sanan y salvan cuando nos unimos en Cristo. Eso fue lo que sucedió en el paralitico sanado por Jesús.
HOMILIA
CREDO
Hermanos y hermanas: el Evangelio nos ha dicho que Jesús, tiene el poder de perdonar los pecados. Supliquémosle para que su perdón alcance a todos. Oremos juntos y digamos:
¡SEÑOR, DANOS FUERZA EN LA ADVERSIDAD!
1. POR LA IGLESIA
Enviada por Cristo al mundo; para que revele el rostro misericordioso del Señor, que no vino a condenar a los pecadores, sino a salvarlos.
2. POR LOS PASTORES DE LA IGLESIA
Para que, sigan siendo artífices de justicia y de paz en Cristo, y siguiendo sus huellas manifiesten a los demás, un amor comprensivo y sin límites.
3. POR EL MUNDO
Para que, dócil a la acción del Espíritu, reconozca y agradezca, todos los dones recibidos de su creador, y tenga expresión de amor y de caridad en el servicio a los más pobres, por encima de toda frontera.
4. POR LOS ENFERMOS, POR LOS ABANDONADOS Y LOS MARGINADOS
Para que en el amor de Dios, encuentren consuelo a sus a sus aflicciones y en nosotros, sus hermanos, benevolencia y ayuda pronta.
5. POR NUESTRA COMUNIDAD PARROQUIAL
Para que el Señor mueva nuestros corazones hacia el prójimo y seamos una comunidad dispuesta a servir con sencillez y alegría.
ROGUEMOS AL SEÑOR
6. POR TODAS Y TODOS AQUÍ REUNIDOS
Para que en el Señor, tengamos la fortaleza de no dejarnos paralizar por nuestra pereza, por nuestra rutina y nuestro conformismo.
Padre, ten misericordia de nosotros y del mundo entero y te suplicamos que escuches los deseos de nuestro corazón. Por Jesucristo nuestro Señor. AMEN
LITURGIA DE LA EUCARISTIA
MONICIÓN COLECTA
Hermanos y hermanas, es el momento de mostrar solidaridad, por los hermanos más pobres de la comunidad y apoyemos al sostenimiento de nuestra Parroquia, aportemos generosamente.
MONICIÓN OFRENDAS
Pan y Vino
Señor, nos acercamos a tu mesa, llevando los dones de Pan y Vino, por tu Espíritu, ellos se transformaran en tu Cuerpo y en tu Sangre, Sacramento de vida que nos fortalece y nos anima a seguirte, pisando tus huellas en el amor, en la comprensión y en la misericordia con los demás.
SANTO
PADRE NUESTRO
SALUDO DE PAZ
CORDERO DE DIOS
MONICIÓN A LA COMUNIÓN
Hermanos y hermanas, Cristo mismo nos invita a su mesa, donde El se ofrece como Pan de Vida. Si estamos preparados, acerquémonos a recibirlo y compartiendo un solo Pan, entremos en comunión con Él y con nuestros hermanos.
¡Señor Jesucristo!
Dios de amor y rico en misericordia,
gracias porque te haces presente,
en medio de nosotros,
nos alimentas con tu Palabra y con el Pan de Vida.
Señor, Tu nos regalas el Don de la fe,
para que creyendo, nos elevemos a Ti.
Sin embargo, cuantas veces en nuestras vidas,
se producen dudas y vacilaciones,
que unidas al pecado, nos llevan a la parálisis del corazón,
del animo a superar el pasado de nuestra vida;
parálisis de fe en tu misericordia infinita,
y de la esperanza y decisión de abandonarnos,
en tus manos con absoluta confianza.
¡Señor Jesucristo!
Sabiendo que nada te podemos ocultar,
porque Tú lo sabes todo, te pedimos:
ayúdanos a salir de nuestras parálisis,
a cambiar nuestras vidas y reencontrar la paz,
a fin de que caminando hacia ti,
también llevemos a quienes te necesitan.
AMEN