MONICIÓN DE ENTRADA
Buenas días (noches) hermanas y hermanos.
La Iglesia iniciamos hoy, un nuevo año en el Ciclo de nuestras celebraciones litúrgicas, el ADVIENTO. Tiempo en que nos preparamos en la espera gozosa del Señor, que viene para hacerse presente, en la vida de cada uno de nosotros, y de, alguna manera, hacernos sentir su amor y deseo de salvarnos.
Dejémonos, pues, envolver por el espíritu del Adviento, abriéndonos a la esperanza y viviendo la fe, en nuestra historia de cada día. Con espíritu de acción de gracias y alegría, comencemos nuestra celebración.
SALUDO INICIAL
ACTO PENITENCIAL
CORONA DE ADVIENTO
BENDICION DE LA CORONA DE ADVIENTO
ORACION DEL ENCENDIDO DE LA PRIMERA VELA. (Un niño u otra persona enciende al mismo tiempo que se lee esta oración la primera vela).
Señor Jesús,
al comenzar el adviento,
nos ponemos ante ti,
con todo lo que somos y llevamos en el interior.
Nuestra débil esperanza
se siente amenazada
por las injusticias,
lucha de poderes,
muerte violenta,
ofertas de placer.
Tú nos invitas a caminar
hacia ti,
fuente de vida y de paz.
Tu luz nos alumbra
los ojos de la fe
para seguir esperando
el milagro de la vida.
Tu amor nos abre los oídos
para escuchar
tus promesas de vida.
Ven a recorrer con nosotros
los caminos del espíritu
en el mundo.
Amén.
GLORIA
ORACION COLECTA
LITURGIA DE LA PALABRA
ENTRONIZACION DEL LIBRO DEL CICLO “A”
Hermanos, hasta el Domingo pasado, hemos estado proclamando las lecturas del Ciclo C , con el Evangelio de San Lucas.
En este NUEVO AÑO LITÚRGICO, que hoy se inicia, proclamaremos las lecturas del CICLO A, que corresponde al EVANGELIO DE SAN MATEO.
Que la palabra de Dios, llegue a nuestros corazones cada Domingo y que, a través de ella, conozcamos mejor el estilo y vida de Jesús, y así, caminando con Él, y bajo su luz, logremos la vida que Dios quiere, para toda la humanidad.
Recibamos solemnemente el Libro de este nuevo Año Litúrgico.
CANTO: “Tu Palabra me da vida” u otro.
MONICIÓN A LAS LECTURAS
Isaías traduce una visión, en una hermosa manifestación a la Paz Universal, una Paz total, que pondrá fin a los litigios de las naciones. El elemento central es el reconocimiento de Dios: de su ley y su palabra.
Pablo, en la segunda lectura nos exhorta a vivir como auténticos cristianos, la existencia debe estar marcada por la luz y no por las tinieblas. La única manera de llegar a ello es revestirnos de Cristo – Jesús.
El Evangelio nos advierte que el momento de la llegada del Señor es incierto y llegara, en medio de la normalidad, por ello, la actitud más adecuada, es la de la vigilancia y espera.
Escuchemos con atención.
HOMILÍA
CREDO
PLEGARIA UNIVERSAL
Hermanos, presentemos con fe y esperanza nuestras súplicas al Señor que viene. Oremos juntos diciendo:
¡VEN SEÑOR, NO TARDES!
1.-POR LA IGLESIA
Para que sin temor, difundamos el evangelio de Cristo por todas partes y ayudemos a la edificación y al crecimiento del Reino de Dios.
ROGUEMOS AL SEÑOR
2.- POR LAS MUJERES MALTRATADAS
Por todas aquellas mujeres que sufren violencia en el hogar. Para que encuentren ayuda en todos nosotros y juntos consigamos apartar a los violentos de nuestras vidas.
ROGUEMOS AL SEÑOR
3.- POR LOS NIÑOS
Para que, reconociéndose en ellos la presencia del Señor, se respeten sus derechos y se erradiquen todo acto de violencia en su contra.
ROGUEMOS AL SEÑOR
4.- POR LOS JOVENES
Para que se les permita encontrar en la sociedad, la ubicación que les corresponde y que, como “centinelas del mañana! reconozcan la necesidad de buscar a Cristo, a fin de descubrir en El la razón de sus vidas.
ROGUEMOS AL SEÑOR
5.- POR LOS NIÑOS Y JÓVENES QUE SE HAN PREPARADO EN LA CATEQUESIS
Para que al recibir los sacramentos que Jesús nos ha regalado experimenten la alegría y bondad de Dios y así sigan perseverando en la fe y lleguen a comprometerse por ´le en medio de este mundo.
ROGUEMOS AL SEÑOR
Escucha, Padre Nuestro, las súplicas que te hemos presentado, y ayúdanos a mantenernos firmes en la fe y la esperanza, aguardando la venida de tu Hijo. Por Jesucristo Nuestro Señor. AMEN
LITURGIA EUCARISTICA
MONICIÓN DE OFRENDAS
Asno
El asno, con su mansedumbre, nos invita a pensar que el niño que viene arropado entre pajas y heno, al calor de los animales, no es un rey terreno. Él es manso y humilde, portador y creador de la paz.
Buey
El buey nos evoca las tareas de labranza, representa el trabajo humano, el duro trabajo humano que dignifica al hombre y lo hace consciente de su condición de hijo de Dios; el pesado yugo del trabajo que el Mesías viene a compartir con los hombres.
Pan y Vino
Nuestra vida se visualiza en estos signos: alimento, trabajo, alegría, dones recibidos… Ellos por acción del Espíritu, se convertirán en Jesús. Lo nuestro llega a Dios, vuelve a él, él lo dignifica.
SANTO
PADRE NUESTRO
SALUDO DE PAZ
CORDERO DE DIOS
MONICIÓN DE COMUNIÓN
Hermanos, Cristo, presente en el Sacramento de la Eucaristía nos invita a su mesa, a participar con nuestra vida de lo que él nos propone vivir constantemente; su amor.
ACCION DE GRACIAS
Te bendecimos, Dios de la esperanza,
porque en la venida de Jesús, tu Hijo y nuestro hermano,
se cumplen todas las profecías,
así, podemos emprender ya
un camino de esperanza y dignidad.
Gracias, Señor, porque hoy nos das razones
para vivir y para amar,
para llenar nuestro vacío existencial,
para vencer la perenne mezquindad humana,
para iniciar hoy, la apasionante tarea que nos confías:
la edificación de un mundo nuevo,
en justicia, paz y solidaridad.
Ayúdanos, Señor, con la fuerza de tu Espíritu.
Amén.